sábado, 30 de octubre de 2010
Viejas recetas.
Analizar, estudiar, o intentar entender a un centralista es una tarea harto complicado. Todos sabemos que un "canalla" es una persona apasionada, fanática, de sentimientos extraordinarios e incondicional, que va a todas partes, que llena la cancha que sea y por lo que se juegue, que alienta, que se emociona, que no entienden (en su mayoría) de razones, que muy pocas hinchadas del mundo son como la canalla. Pero tienen una particularidad algunos. Y ésto se parece a la política. Muchos quieren aplicar políticas antiguas que dieron resultados en otros tiempos a los momentos actuales, pero sin aggiornarse al presente para mejorar el futuro. Vivir e intentar vivir con recetas antiguas de otra ocasión no es bueno, y vivir con odio por un pasado no bueno, no es de inteligentes.
Claro, ustedes podrán traspolar en la historia argentina situaciones y pensar en personajes. Pero, aparte de inducirlo a la pensar en esas cosas (para que vean que los periodistas deportivos no solo sabemos de la pelotita) cambiemos nombres y situaciones y nos sumergiremos nuevamente en la realidad canalla. Esto, que algunos quisieron hacer diciendo que en el ascenso se puede jugara bien y como en primera, quedó sepultado con el correr de los partidos y con un equipo sin jugar a nada y en en medio de la tabla, aunque no lejos. Pero ahora algunos insisten con viejas recetas, como cuando las abuelas de los que tenemos más de cuarenta años traían desde su amor recetas caseras que en su mayoría terminaban empeorando al enfermo; muchos, antes se morían jóvenes. Y parece increíble, pero algunos están midiendo el sentimiento popular canalla diciendo que volvería Coudet. Un grande que pasó, pasó dije, por Central, pero ya fué. Peor aún, otros quieren que venga el "Piojo" López. Una idiotez sería. Central necesita entonces de jugadores plenos, bien fisicamente, mentalmente y, claro, futbolísticamente. Por lo tanto yo creo que hay que valorizar a los que aportaron algo por la institución, pero no creerlos interminables porque eso sólo complica la realidad centralista.
Rivoira, entre líneas, dío a entender algo: que si no están bien fisicamente no juegan o con cara de "bragueta" tampoco. Me tranquilizó. Esto también va para lo que están adentro del plantel.
No compren ex-jugadores, el futuro no se construye con los adultos, sino con los jóvenes que están en acción.
Fernando González
Periodista
lunes, 25 de octubre de 2010
Rivoira por Merlo... ¿la solución?
Después de la muy triste imagen que dejó Central y el haber perdido el partido de una manera muy lastimosa había dos señales que indicaban la inminente salida de Merlo. La primera, la cual es un conjunto de situaciones, fue, como les decía, la paupérrima actuación canalla; la otra fue la falta de reacción y, la última, era por decantación. Si frente a Merlo a Mostaza lo insultaron, aún ganando, se imaginan ustedes que podría llegar a ser el Gigante frente a los cordobeses después de la derrota con los correntinos: una verdadera olla a presión y una casi segura reacción violenta de muchos. Y en el segundo lugar, detalle que no es menor, fué la nota que dió Killy González a TyC. Cuando le preguntaron que pasaría con el entrenador les constestó: "no sé, es grande, sabe lo que debe hacer". Estas últimas declaraciones nos marcaban que el máximo referente del plantel y algunos más dejaban de bancar al técnico y le soltaban la mano. Por lo tanto a nadie le sorprendió la salida de Merlo.
Sigamos. Es cierto, nunca jugaron bien, ni a nada: a lo Merlo, que tampoco está tan lejos, que falta. A esta hora el casi seguro nuevo conductor será Rivoira. Conocedor de ascenso. Pero los que lo vimos dirigir en muchas instituciones y los que le vimos utilizar muchos jugadores, sabemos y les prevengo que este entrenador no es amante del buen fútbol. Es, como les marqué antes, un conocedor del futbol de ascenso y nada más (recordemos que estuvo en Huracán y fracasó, además de ser insultado por la gente local y de pelearse con ellos). Seguramente el Nacional B se gana con conocedores y no jugando bien, pero que nadie espere cambios sustanciales. Algún que otro cambio deberá hacer, todo técnico nuevo lo hace, sino para qué viene, es la pregunta.
Por tanto no digo que es más de lo mismo; sólo les digo que es parecido. Podrá ordenar al equipo, cambiará tácticas y jugadores, pero siempre prevalecerá el resultado sobre el buen juego. El cambio es justo a tiempo y necesario. Falta mucho, pero no hay que dejar escapar a los de arriba.
Fernando González
Periodista
martes, 19 de octubre de 2010
Parámetros normales.
Es cierto que estaba todo preparado para que Central reafirme su candidatura a ascender en este duro campeonato de ascenso, y que debía ser protagonista, como si lo hizo en los primeros veinte minutos. Pero también era cierto, y eso lo vengo marcando desde hace tiempo, que iba a intentar ganar el partido jugando a lo Merlo. ¿Y qué es jugar a lo Merlo?. A nada. Y quedó demostrando definitivamente que no tiene variantes en ninguna parte del campo. Pero voy más a fondo en ésta oportunidad.
Central no juega a nada como dicen todos (que no están tan equivocados); Central juega a lo Merlo. Se llevó por delante al rival pero no se le cayó ni una idea, ya que no tiene dentro del campo jugadores capacitados para esa función, y a Reynaldo jugar con enganche no le gusta, entonces coloca dos delanteros que corren y ponen mucho más de lo que verdaderamente juegan. Por lo tanto, Figueroa y Toledo se convierten en un gran polo magnético que atraen a todos sus compañeros, éstos magnetizados comienzan a tirar y tirar centros que a veces son sin sentidos, y todo el movimiento se convierte en recurrente. Por lo tanto el rival se asienta en el campo y todo se convierte en tedioso. Merlo, para no escuchar silbidos o insultos en el segundo tiempo hizo ingresar a Medina, que a mi entender es sólo un mediocre jugador del ascenso que cuando ingresa aporta vértigo pero no claridad.
Habiendo entendido esto, podremos entonces llegar a entender porque juega tan mal y porqué empató frente a los mendocinos: porque juega a lo que salga, y jugar a lo que salga puede ser peligroso, tipo ruleta rusa: se puede convertir por azar pero también le pueden convertir por el mismo camino. La falta de criterio del entrenador, colocando marcadores laterales que no lo son (en el caso de Valentini no sé que es), Chitzoff que pone pero no sabe y los del medio que apenas recuperan el balón le tiran pelotazos a los delanteros y todo termina siempre igual. Jugando así se está a cuatro puntos y parece que mi teoría se reafirma; recordemos cuando les dije que que el Nacional no se juega, se gana, dónde hay que terminar dentro de los primeros puestos o lo más arriba posible la primera rueda. Después del receso, las primeras cinco fechas será de reacomodamiento de los equipos, donde muchos tendrán incorporaciones y bajas que hará que necesiten algunas fechas de amalgamiento y poder armarse como equipos, como aquellos que les costará readaptarse físicamente al fútbol después de la pretemporada. Entonces alrededor de la sexta o séptima fecha se deberá ingresar a ese tramo del torneo y obtener un sprint con la mayor cantidad de puntos hasta la décimoquinta fecha aproximadamente y allí se estará en condiciones de saber si se puede ascender o no. Ningún equipo ha demostrado superioridad; ésto abona mi tesis de como es el campeonato. Creo que se está, aunque jugando mal, dentro de los parámetros normales del Nacional B.
Se fueron silbados, fundamentalmente el entrenador, pero aquí bancaron a Ischia que ganó un sólo partido, a Russo vendiendo humo, a Madelón y su viaje a la luna y algún ignoto por allí. Tal vez algunos antes de expresar su bronca, deba repasar el pasado y mirar el futuro con algo más de tranquilidad.
Fernando González
Periodista
miércoles, 13 de octubre de 2010
Seguir trabajando.
Observando una vez más la realidad me dió la sensación que algunos no terminan de comprender el ascenso y creen, equivocadamente, que ya se encontró la ruta que catapultará a primera división. Pero me mantengo en el concepto de siempre, hay que tener calma, mucha calma porque no se a logrado nada y muchos menos el objetivo. Es cierto, frente a los funebreros se jugó bastante bien, frente a Merlo pese a obtener los tres puntos, hubo puntos flojos. Por eso ni aquello era tan espantoso, ni ésto es tan bueno. Ahora lo que habrá que buscar es el equilibrio, clave fundamental para llegar a fin de año cerca de los de arriba, o arriba de todo, y esperar la segunda rueda con optimismo fundamentado en las buenas presentaciones del canalla en la primera mitad. Pero no quiero ser negativo, pero es muy difícil que un equipo de Merlo juegue bien, y mucho menos probable que en el ascenso se pueda hacer por más que se quiera. Estos dos ingredientes mezclados pueden dar como resultado un ascenso pero nunca un juego bonito. Estos dos partidos ganados dan esperanza de mejoramiento, pero el pronóstico no es definitivo. Central tendrá problemas a lo largo de todo el torneo, pero lo fundamental será entonces encontrar los medios necesarios para reponerse y regresar a la senda del triunfo. Eso se logra con el correr de las fechas y con suma dedicación. Frente a los mendocinos me imagino un partido duro, muy duro, y no espero en absoluto que tenga una gran supremacía sobre el rival, es más espero un encuentro complicado. No jugando bien están a dos puntos del ascenso directo, imagínense ustedes si se encuentra regularidad. Por lo tanto vuelvo a pedir calma, aquello fué para alarmarse pero no para desesperarse. Y ésto no es para festejar, sino para tener esperanza.
Se acuerdan varias semanas atrás cuando les nombraba a el Diputado Rossi, ahora va a la cancha y todos le hacen reportajes. Hace mucho les dije que desde el Gobierno argentino, vieron con muy mala cara que Central haya descendido y el negocio quedase en la mano de TyC; y además en un 2011 electoral, sería bárbaro que el más grande regrese con la presencia de políticos allegados al poder nacional. Falta que los árbitros sigan expulsando rivales y todo cerrará entonces. Guisazola me parece que lo cuelgan pronto, a Monsalvo de lan la salida y Gómez está cerca de irse. Cuidado: Fatu, a fin de año, dicen que se va. ¿Serán cuatro o serán cinco los refuerzos?...
Párrafo aparte: Me alegra la salida de los mineros chilenos, porque son personas igual que nosotros, y más porque soy cristiano, pero me viene a la mente cuando les "hermanos chilenos" ayudaron a los ingleses en Malvinas para aniquilar a nuestros héroes chicos argentinos. Paradoja del destino. Ahora en Malvinas harán los británicos ejerccios militares... uhhhmmmm...
Fernando González
Periodista
viernes, 8 de octubre de 2010
En el camino.
Insisto con la idea que no me gusta como juega Central, pero aún más insisto con la definición que les hice algún tiempo atrás, que aunque Menotti se enoje conmigo, el Nacional B o ascenso se gana como sea y no se juega. Decir que se encontró el rumbo y que se está en el camino correcto tal vez sea apresurado; sólo los resultados podrán mantener o indicar que el camino es el correcto. Pero quiero ser justo. Fue el mejor partido canalla del campeonato. No jugó atractivamente, pero mostó un gran orden y paciencia, desmostrando que le queda mejor jugar de visitante (vieron que los hinchas no juegan y solos se puede ganar de visitante, y eso de que la gente juega es verso).
Empezaron algo superados, pero pronto se ordenaron y capitalizaron los errores del local. Cuando el pulpito González (la figura de la cancha) y Paglialunga hicieron pie en el medio, todo fué azul y amarillo. Sólidos en defensa, impasables y criteriosos el el medio y con un Figueroa que no brilla, pero corre y mete, y además convierte. Figueroa está en su mejor forma física desde que volvió a Central, a mi criterio. Entonces lo que pretende Merlo es ganar y lo está haciendo. Además corrigió algunos defectos. Claro, jamás brillará su juego, pero comienza a convertirse en efectivo y acá lo único que cuenta es el resultado y ascender. El resto lo dejamos para el próximo año. Tampoco por haber ganado un par de partidos diremos que ingresamos en una primavera, porque esto es largo y pueden pasar un sinfín de cosas y circunstancias que sólo en el ascenso se pueden ver. Por ahora hay que seguir bancando al entrenador y no esperar grandes momentos futbolísticos, sólo lucha y resultados. Da la sensación que Central comenzó a hacer pie en el ascenso.
Fernando González
Periodista
domingo, 3 de octubre de 2010
Sin jugar se puede ascender.
Seguramente ustedes encontrarán alguana que otra discrepancia con mis anteriores editoriales; pero no lo hago desde el gusto, sino desde la realidad. En mi nota anterior se habrán dado cuenta que ya no banco más a Merlo, y mucho menos su juego. Pero deberemos tener algunas consideraciones que les marqué hace algún tiempo atrás. Veamos entonces. Aunque muchos no estén de acuerdo conmigo, en el ascenso NO SE PUEDE JUGAR. Lamentablemente los partidos se tienen que ganar, y sí, como sea, y dejo mis afanes de grandeza de buen fútbol, porque desde hace 23 años veo el Nacional B y 40 la B, y cada vez más abona la idea de que no se juega a nada. Pero vayamos al mundo canalla. Central jugó mal. Central no juega a nada, sin ideas, sin patrón de juego, pero el nerviosismo de la gente hizo llegar a situaciones insospechadas. Kempes no juega más, el Polillita tampoco, Palma menos. Entonces habrá de tener cuidado con los ídolos de barro que se escogen. Voy a fondo. Jugó mal, pero con poco está cerca. Lo insultaron a Merlo, entrenador que no me gusta, pero si se va... ¿quién lo suplantará?... ¿Rivoira? más de lo mismo.
Central debe ascender, y lamentablemente debe jugar casi así, a nada, a ganar, y nada más (Si el flaco Menotti me lee se enojaría mucho; perdón, César) pero es el ascenso. Fueron tres puntos, nada más, nada más. Deberá seguir fabricando resultados, ganándo tres puntos, siempre o casi siempre, porque hay que ganar, en el ascenso sólo hay que ganar. Observé un montón de equipos y no juegan a nada, es verdad que el canalla tampoco lo hace. Ahora bien. Jugar bien o ascender es la pregunta. Ascender es la respuesta. Siempre dije que manifestarse es bueno, pero aplaudieron a Russo, y a un montón de vendedores de humo. Y ahora piden por Medina.
Señores: Medina es un jugador del ascenso, mediocre, que en lo poco parece mucho. A Merlo se lo insulta, pero no crean ustedes que con otro entrenador todo cambiará. O se olvidan que algunos aplaudieron a Ischia, a Alfaro, a Madelón o hasta al mismo vitamina, entonces está bien manifestarse, está bien demostrar su enojo, pero los que votaron a Speciale, a las cuatro de la tarde lo hicieron con el afán de que Burruchaga venga, y conocidos los resultados, trajeron a Merlo. Vaaaamooooossssss... Central volverá a primera... como sea...
Ahhh... Rossi estuvo en la cancha... es como si yo voy a ver un partido de fútbol americano... aahhhh... se los había dicho... el 2011 es electoral... y a nadie le conviene que un monstruo enté abajo. ¿Se entiende?.
Fernado González
Periodista
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