El pasado domingo 13 de septiembre se cumplieron 43 años de la OCAL (Organización Canalla para América Latina).
Nos hemos reunido con el Dr. Ferrari del Sel y el Cp. José A. Vásquez para repasar los hechos salientes en la historia de tan señera organización paracentralista, que nació como una entidad dedicada a santificar el goce a los leprosos y actualmente es una reserva del sentir centralista, del êthos canalla. Sobre el final, una sorpresa, de mano del más grande prócer centralista.
Tal vez el partido frente a los de la Capital de la Provincia -o, para ser más amplio, los dos últimos- podían reflejar para que está Central en el presente torneo. Yo no creo que sea así, pero si nos ajustamos a esas definiciones veremos que de 6 puntos de local se sacó sólo uno, y eso no está demasiado bien. Creo, humildemente, que los partidos, todos, y los cambios obligados o no, podrán demostrar la realidad de Central y para que está. Muchos, ya creían peleando el campeonato; ahora muchos creen en el descenso. Pero será la hora de trabajar, con correción como siempre los hace el entrenador en lo fútbolistico y en lo psicológico. Con Bánfield se sabía que iba a ser complicado; no porque los del sur de Buenos Aires sean un gran equipo, sino porque juegan a no jugar. Y Central no supo como jugar por complicaciones propias y estratégias del rival. Nunca cambió el canalla, solo pelotazos. Y con Colón, que vino a buscar un punto y se llevó tres, no supo jamás como resolver. Entonces entendamos los que les vengo comentando. Vemamos lo siguiente: es muy bueno tener en la vida objetivos, y es mejor aún esforzarce para lograrlo, pero hay veces que uno deberá cambiar la estratégia y el desempeño para poder seguir conquistando logros. Un ejemplo, el titular de un comercio que le bajan las ventas seguirá el mismo rumbo buanscando el mismo objetivo pero cambiará la táctica para mejorar sus ventas. Cambimos las plalabras y veremos a un Sabalero que sin hacer mucho mucho, supo como controlar el partido (no me quiero meter en el análisis propiamente del partido con sus juagadores) y los de Cuffaro jugaron mál y siempre a lo mismo. El pelotazo o el centro. Ya no se puede seguir que se gana con los pibes, o que ganan corriendo; porque eso los rivales ya los conocen y saben conjeturar a Central, entonces -y se los dije en la nota anterior- habrá que cambiar en alguna ocación, sorprender, cambiar los ritmos, asociarse y no ser un equipos de movimientos recurrentes. Se jugó mal a mi gusto. Es más, se jugó a nada. Así no me gusta. Para ir cerrando, el DT con sus jugadores deberán encontrar las modificaciones necesarias, cuidado de no hablo de nombres, sino de juego. Tal véz de visitante, les salgan un poco más a jugar y se podrá volver al triunfo, y seguir con el todos corren, todos ponen y jugan de vez en cuando. Pero no conozco ningún equipo que gane sin hacer goles (bueno recuerdo lo de Tucúmán) por lo tanto sin desesperar es hora de algunos retoques.
Cultura Canaya está en marcha con los festejos del 120 aniversario de Rosario Central. Esta iniciativa, que empezó a circular desde la semana pasada, tenemos plena confianza de que tendrá el apoyo de toda la canallada, que tendrá un nuevo motivo de orgullo para gritar a viva voz la pertenencia a Rosario Central. Por cosas como estas es que es tan lindo ser de Central. Por ver a su gente en movimiento. Por la creatividad de sus hinchas. Porque la tenemos más larga. Porque la tenemos más linda.
Para entender el partido frente a Banfield, habrá que entender que el visitante desde los 30" comenzó a hacer tiempo. Recuerden ustedes, que casi en esos primeros segundos de juego que les nombré, en el primer saque de arco, el arquero visitante empezó a hacer tiempo. Y allí estuvo la clave de los del sur de Buenos Aires. Ellos jugaron de una manera a "no perder" y jamás tuvieron la iniciatativa, sólo en algunas oportunidades se dedicaron a devolver golpe por golpe, pero nunca a ser protagonistas. Planteado la contienda de esta manera, había que esperar que los de Cuffaro pudiesen romper el esquema de 4-4-2 que colocaban los de Falcioni (menos mal que no vino a Central), y sólo en algunas oportunidades pudieron, pero volvieron a desmotrar ser un equipo equilibrado, sólido y compacto. Es cierto; Central jungó ancho, muy ancho, pero le faltó profundidad. Pero jamás se desesperó. Todos sabemos que la desesperación es mala consejera. Y Central, como el paciente inglés, fue paciente. Y eso es trabajo. Y eso es táctica. Y eso es claridad de conceptos. Pero claro, con ésto no alcanza. Tal véz sea cierto, que jugando así se podrá obtener más resultados positivos que negativos, pero corriendo solamente no alcanza. Particularmente no me gustó como jugó el canalla, porque, insito, jugar ancho es lindo, pero no pronfundo es algo complicado, y en ésta ocación algunos jugadores bajaron notablemte su rendimiento. Léase por la franja izquierda. Se llegó poco, pero le llegaron bastante. No le convirtieron, y eso ésta bueno. No es problema entonces si uno juega o no. No vamos discutir estupideces, el viejo axioma dice, "basta que uno no quiera para que dos no puedan". Y Central no pudo. En partidos de torneos anteriores como éste, se perdían; por lo tanto se logró equilibrio. No fué el taladro de Falcioni, la medida pra saber dónde se está parado; serán los partidos con los Pinchas, los Granas, o con los de la Pandilla. Esós nos marcarán el lugar dónde ésta ubicado Central. Por no ganar no fueron un desastre, pero habrá que encontrar alguna otra jugada de distracción, porque la sensación que dieron los locales, es que se está convirtiendo en un equipo previsible; y allí es dónde se debe trabajar ahora. Tengan en cuenta lo siguiente: en 5 partidos le conviertieron 2 goles, uno de penal y otro de carambola; es decir que del medio hacia atrás, todo Ok, pero de la mitad haci adelante, parece ser un materia pendiente de aprobar. Fué difícil porque le jugaron a no perder los visitantes; pero muchos vendrán al Gigante a no jugar, y en ésto se deberá mejorar. En realidad, un punto para sumar... FG...hasta la próxima...Bye..
El viernes tuve el agrado de asistir a la presentación oficial del libro escrito por Fabián Bazán, "El Gigante de Arroyito: La verdadera historia". En él no sólo se derrumban mentiras que ya pasaron el cuarto de siglo ("los militares le regalaron la cancha", por poner un ejemplo) o se recopilan datos ya anteriormente publicados en cuadernillos ocalistas; este libro bucea en los orígenes del Central Argentine Railway Club, en todos los coliseos donde sus paladines libraron batallas, y cómo Central pasó de jugar en un baldío al lado de la vía a poseer un verdadero templo del deporte y la cultura. Aquí, las palabras del autor.
Pasaron 4 fechas y muy pocos creían o imaginaban la realidad. Pero ustedes ya habrán leído en varias oportunidades en ésta página las difrentes explicaciones del porqué se podría llegar a esto. Entendamos que cuando se tiene el objetivo definido, cuando se conoce el camino a recorrer, las diferentes situaciones u obstáculos que se pueden presentar son mucho más fáciles de sortear. Es, en consecuencia, estar en sintonía, y canalla, claro. Haber ganado en cancha del Globo al Funebrero fue una enorme sastifacción para todos los centralistas y para todos los que defendemos una determinada idea. Los conceptos són muy claros, las ideas, demasiadas claras, el convecimiento por sobre todas las cosas, y el espíritu, las ganas, la entrega y el fútbol aparecen. Cuando en otras notas les escribí sobre la claridad de conceptos y el entendiemiento de ellos por parte de los jugadores, les marcaba que aquí no hay un fenómeno. Aquí se gesta un equipo con pequeñas sociedades dentro del campo y compromiso. Entonces aparcen los resultados; se lesiono Mendez, un gran jugador, pero lo suplieron muy bien (el chico Zárate parcecía tener 15 partidos en primera), ya que no hay jugadores sobresalientes pero sí un equipo que se brinda entero y es muy solidario. Entonces tenemos un Central que juega bien, bastante bien, a veces no tanto, que corre mucho y con corrección, que retrocede con criterio, y se esfuerza hasta el ultimo segundo. Además un entrenador que sabe de lo que habla ya hace jugar, y NO HACE DECLARACIONES PARA LA TRIBUNA...(y eso que se llama Russo). En la tarde capitalina, cuando se pudo jugar, se jugó; y cuando hubo que ponerse el overol y trabajar el partido, lo hizo y transpiró la camiseta. Por eso ganó, y fué justo. Pero cuidado: se puede perder y mal....porque són pibes y están en formación. Se está gestando un gran equipo. Eso sí, ya se dieron cuenta y les hicieron darse cuenta, que están en sintonía con lo que el entrenador pretenede, es decir están en SINTONIA CANALLA. Párrafo aparte. Salud Profe Vigna por estar en Central, es un orgullo tener un profesional de los kilates tuyo... pocos los tienen. Hay un extraordinario y sensacional médico deportólogo en Rosario: Carlos Lancellotti, la eminencia, y otro muy bueno, que volvió a Central: el doctor Campillo. Buena elección. Felicitaciones. Tranquilos.. canallas...tranquilos... que todos están en... en... SINTONIA CANALLA.
FG...Bye....hasta la próxima.
* * * PALABRAS DE LOS PROTAGONISTAS * * * Emilio Zelaya, autor -una vez más- de un gol clave.
Lucas Moya, otra vez como titular por el andarivel izquierdo.
Gonzalo Castillejos, el centrodelantero.
El entrenador de arqueros, y las comparaciones inevitables con el arranque del Central de Menotti 2002.
COMENTARIO: FG NOTAS: Carlos Gustavo FOTOS: Mark-C
Previo al programa de hoy, te presentamos la conferencia de prensa COMPLETA de nuestro entrenador, Ariel Rubén Cuffaro Russo, luego del 2-1 ante River Plate.
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Querer menospreciar el triunfo de Central, diciendo o manifestando que se jugó frente al peor River de las historia, me parece de una bajeza preocupante dentro del periodismo. Está bien que el grueso de la gente, a hinchas me refiero, les dé esa sensación, pero lo que tenemos la obligación de analizar el juego y explicarlo, deberemos tener en cuenta otros factores muy importantes. Más abajo se darán cuenta a que me refiero. No hay ningún misterio en este equipo; simple sería para mí copiar notas anteriores, o mucho más simple decirles a ustedes que relean varias de mis reflexiones expresadas en ésta página algún tiempo atrás. El partido frente a los millonarios fue pensado desde lo táctico en forma brillante, Y ejecutado dentro del campo por los jugadores en forma casi impecable. Insisto con éste concepto: "ahora hay jugadores que tiran todos para el mismo lado, y un entrenador NO SANATERO". El arquero ataja cada vez mejor no sólo porque ha mejorado, sino porque tiene una defensa segura, compacta, dónde la pareja de centrales trabajó casi en forma notable, sin fisuras. Porque los laterales entienden el partido, nunca se proyectan en forma simultánea, pasan al ataque con criterio y decisión. Pero lo que es mejor aún, es el retroceso de equipo. Cada uno baja con la marca o lo hace a ocupar lugares estratégicos, para no ser sorprendidos, y ahogan al rival, dejando que nunca reciban el balón libremente - aunque esó pasó con el Ogro -. Entonces nadie retrocede sin sentido, ni caminando ni gritando de la mitad de cancha de como deben hacerlo los compañeros sin siquiera transpirar la camiseta. Ahora van entiendo el principio de ésta nota. El medio. Bueno, el medio está trabajando de dos maneras y muy acertadas. La primera podríamos decir y afirmar que todos corren, todos, todos...todos. Que marcan y se sueltan con una visión tan clara de la cancha que es digna de alabar. Que cada uno sabe lo que debe hacer y lo que puede hacer.Y en ésto se nota el trabajo de Cuffarito. Che..cuidado que éste sabe....y segundo Méndez, que se come la cancha, la tiene como dicen los jóvenes, tan clara....y el resto acompaña para arriba y para abajo. Entonces el arquero está mucho más tranquilo con los defensores (leáse que cambió uno de los zagueros y el que entró jugo mejor que Valentini), la defensa más serena y firme con los del medio, y los del medio con los defensores y los delanteros. Cóctel perfecto para obtener resultados más la preparación dísica extraordinaria. Ahora se podrá entender el principio. Les dije, analizando el plantel y los demás equipos que tal véz no esté para el primer puesto; pero sí para pelearle a todos de igual a igual. Faltaría algo más en la estocada final; la definición. Pero lo que natura no da, Salamanca no presta. Demasiado claro. Entonces decir que River fué un desastre, puede ser como figura, pero tengan en cuenta, que en el primer tiempo, por momentos Central jugó muy bien, y en el segundo cuando perdió el balón, corrió, luchó y nunca dejo que se vengan. El gol lo hicieron medio de carambola. Lo dejaron sin lugar para moverse, los presionaron hasta la última jugada; se desprendieron cunado era justo y necesario, y casi aumentan el marcador. Allí está. River jugó mal, pero Central hizo todo bien o casi todo y obligó al visitante a equivocarse. Se ganó con justicia, y al rival, insisto, más allá de no andar bien, no lo dejo armarse nunca. A Central le conviertieron en 3 fechas un gol de penal y uno de casualidad. Nada es tan complicado como algunos entrenadores que intentan ganar fortuna con la "guitarrita". Sólo la capacidad, la entrega y la claridad de conceptos desde el banco hacia los de adentro y la convicción y talento de los de adentro, hacen que se sume de a 3. Ahhh...tranquilos...tranquilos.
GIF animations generator gifup.com En estos días he notado una cierta alegría de parte de muchas personas con la actualidad futbolística canalla. Pero recuerdo y debo recordarles que fuí yo quien se encargó varias veces por radio y por este mismo medio de tranquilizar a los hinchas manifestándoles que hay un cuerpo técnico de jerarquía y jugadores con instinto de superación. Pero cuidado: son pibes, como cantan en la cancha, y en algún momento van a caer. Y feo. Sí, porque pueden perder mál y por varios goles, porque pueden caerse psicológicamente en un partido, y puede ser muy doloroso; Eso sí, siempre y cuando no se trabaje en ese aspecto. Pero sabemos que Cuffaro no sólo trabaja en lo futbolístico, sino también en lo emocional. Todo está very good.... pero esto recién empieza. Observando a Central y a los rivales, todos están muy parejos, y tal vez sobresalga el que esté mejor preparado fisicamente, pero cuidado, que no sólo correr asegura resultados; en algún momento habrá que hacer correr más la pelota y menos los jugadores. Veamos entonces lo futbolístico propiamente dicho. Corren, es cierto, y mucho, pero hay una idea instalada de jugar o intentar jugar bien, con pelota al piso y tocando de primera, como lo hacía el Polilla. Todos corren, pero con sentido. Todos relevan, todos llegan, todos distraen. Se utiliza todo el ancho del terreno, y eso es muy bueno. Se amaga entrar por izquierda y se entra por derecha (como Lula). Se cambia el ritmo en los lugares precisos. Nunca se proyectan los marcadores laterales en forma simultánea (algo que Menotti dice desde hace 40 años). Siempre se intenta. Ahora hablemos de Méndez. Parece que lo descubrieron. Nooooo... Mendéz siempre jugó bien, pero algunos entrenadores no se dieron cuenta o no quisieron darse cuenta. Se los resumo fácil. ¿De que juega Méndez?. Juega de Bolatti en el Huracán de Cappa del torneo anterior. Juega de 5, aparece de 10, retrocede como 3, defiende como 6, se proyecta como 8, aparece como sorpresa y ejecuta los tiros de esquina. Parece una máquina visto de ésta manera. Pero no lo es. Es un jugador que sabe pero encontró un entrenador que lo deja jugar y lo libera. Por eso rinde. El resto, juega, corre, lucha. Llegan a 3/4 y no tienen que girar hacia atrás a ver dónde está el Killy para asentir la jugada o reprocharla. No está el Equi haciendo caras de fastidio. Ahora llegan Y SON LIBRES DE DEFINIR. Todos tiran para el mismo lado. Es mucho más claro el juego de ahora de los que muchos creen. Volviendo al principio. No se dejen llevar de cierta prensa que cuando se gana los halagan hasta el hartazgo, porque son ellos los que esperan para destruir cuando se pierde. En estos dos partidos Central no es Holanda del 74. Pero tampoco un desatre. Seguirán en éste camino. Con claridad de conceptos. Pero cuidado, a no engañarse: éstos pibes recién están saliendo del cascarón. El barco, TIENE CAPITÁN Y CONOCE EL CAMINO. Ni son los mejores, pero tampoco los peores. Estos son algunos de los fundamentos de la realidad.